¿Por qué es tan importante?
Durante el embarazo, los cambios hormonales pueden hacer que las encías sean más susceptibles a la inflamación y el sangrado (gingivitis gestacional). Si no se trata, puede evolucionar a periodontitis, una infección grave que se ha asociado con riesgos como parto prematuro y bajo peso al nacer. Cuidar tu boca es cuidar a tu bebé.